Periódico La Jornada Domingo 4 de septiembre de 2022, p. 19
Viena. La central nuclear ucrania de Zaporiyia, ocupada por Rusia, volvió a perder la conexión con la red eléctrica de la nación eslava, aunque sigue activa por una línea de reserva, anunció ayer el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que mantiene un grupo de expertos en el lugar, al tiempo que Turquía afirmó a Rusia que puede ser mediador en torno a la planta, como lo hizo con el acuerdo sobre cereales y granos.
La última línea que aún funciona fue dañada explicó el OIEA, que recordó que las otras tres se perdieron en el conflicto. El informe añadió que la central continua generando energía gracias a una línea eléctrica de reserva.
El incidente, similar al ocurrido el 25 de agosto, se produjo después de nuevos bombardeos en la zona, indicó el organismo. En esa fecha la central, la más grande de Europa, fue desconectada de la red ucrania por primera vez.
La potencia de las dos unidades de energía que funcionan en la nucleoeléctrica de Zaporiyia se redujo a la mitad, el flujo de electricidad sólo llega a los territorios pro rusos, aseguró ayer a Sputnik el representante de la administración militar rusa en la región, Vladimir Rogov.
Seis expertos de la agencia de la ONU se encuentran actualmente en la planta y dos de ellos permanecerán de manera continua para ayudar a estabilizar la situación, sostuvo el jefe del OIEA, Rafael Grossi, quien declaró que una inspección de las instalaciones confirmó que la integridad física de la planta fue violada, lo cual consideró inaceptable.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, propuso ayer en una llamada a su par ruso, Vladimir Putin, aceptar su mediación para ayudar a evitar un desastre en la central de Zaporiyia, informó la presidencia turca, que no detalló si se hizo la misma propuesta al mandatario ucranio, Volodymir Zelensky.
En julio, Ucrania y Rusia, con la Organización de Naciones Unidas y Turquía como garantes, alcanzaron un acuerdo con el fin de permitir la exportación de millones de toneladas de granos bloqueados en puertos ucranios del mar Negro a causa de la guerra.
El Ministerio de Defensa ruso acusó ayer a las fuerzas ucranias del fallido intento de capturar la central de Zaporiyia, al afirmar que una fuerza naval de Kiev de más de 250 efectivos intentó desembarcar en la costa de un lago cercano a la planta. Reuters no pudo verificar.
Moscú denunció un ataque anfibio sobre las instalaciones y el portavoz ruso, Igor Konashenkov, aseveró que el asalto fue repelido y provocó la muerte de 47 soldados de Kiev. Ucrania y Occidente acusan a Rusia de usar la planta como base de armas pesadas para disuadir a las tropas de Kiev de disparar contra él. Hasta ahora, Moscú ha rechazado los llamados internacionales para que retire a sus tropas de la planta y desmilitarice la zona.
El ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, negó antier que Rusia tuviera armas pesadas en la central o en sus proximidades y acusó a Ucrania de cometer terrorismo nuclear con sus ataques.
La localidad fronteriza de Tiótkino, situada en la región rusa de Kursk, fue nuevamente bombardeada por las tropas de Ucrania, no se registró ninguna víctima, denunció el gobernador regional, Roman Starovoit.
Protestan checos contra su gobierno por dar prioridad a los ucranios
Afp Periódico La Jornada
Domingo 4 de septiembre de 2022, p. 19
Praga. Unas 70 mil personas se manifestaron ayer en República Checa en contra del gobierno, al que acusan de prestar más atención a Ucrania, devastada por la guerra, que a sus propios ciudadanos.
Organizada bajo el lema República Checa primero, la protesta tuvo lugar en Praga, la capital, y quiso dar visibilidad a los problemas relacionados con la aceleración de la carestía de los alimentos y los energéticos, la vacunación contra el covid-19 y el fenómeno migratorio.
Los manifestantes pidieron la dimisión del gobierno de centro-derecha de Petr Fiala, que entró en funciones en diciembre.
Para Ucrania lo mejor y para nosotros dos suéteres, se podía leer en una pancarta, una crítica al costo de la calefacción ante un invierno que se anuncia duro en plena crisis energética por la invasión rusa de Ucrania.
Los precios de la energía aumentan en todo Europa debido a la reducción del suministro de gas desde Rusia, que acarrea un aumento de los precios de la electricidad.
Estimamos que el número de participantes fue de unos 70 mil a las 12:30 (horas), tuiteó la policía.
República Checa, que ocupa actualmente la presidencia en turno de la Unión Europea, ha acogido a unos 400 mil refugiados de Ucrania desde que comenzó la guerra el 24 de febrero y ha prestado una importante ayuda militar y humanitaria a dicho país.
Según Fiala, la manifestación fue organizada por personas prorrusas cercanas a posiciones extremistas y cuyos intereses se oponen a los de República Checa.
Esos eslóganes y la interpretación de los hechos coinciden con la postura rusa y, en mi opinión, no se corresponden con los intereses de la República Checa, declaró el premier, según la emisora Radio Praga. La República Checa se encuentra entre los países de Organización de Tratado del Atlántico Norte que desde la agresión rusa no han dejado de enviar ayuda a los civiles de Ucrania.
Asisten miles de rusos al funeral de Gorbachov
El presidente Vladimir Putin no acude por problemas de agenda
▲ Gorbachov fue velado en la Sala de Columnas de la Casa de los Sindicatos, en Moscú. En la imagen, desde la izquierda, la hija del último líder soviético, Irina Virganskaya, con su esposo y la hija de ambos.Foto Ap
Afp, Ap y Europa Press Periódico La Jornada
Domingo 4 de septiembre de 2022, p. 19
Moscú. Miles de rusos dieron su último adiós ayer a Mijail Gorbachov, el último líder de la Unión Soviética, en una sobria ceremonia sin honores de Estado y sin la presencia del presidente Vladimir Putin.
Gorbachov, quien falleció el pasado martes a los 91 años de una larga y grave enfermedad, fue enterrado en el cementerio de Novodévichi en Moscú, junto a su esposa Raisa, fallecida en 1999, mientras que una orquesta militar tocaba el Himno Nacional ruso.
Los asistentes hicieron fila ante la Casa de los Sindicatos, un lugar simbólico de Moscú donde se velaron los restos de varios dignatarios comunistas, entre ellos los de Josef Stalin en 1953, para despedirse de Gorbachov. En el interior se expuso un retrato de gran formato del difunto ex dirigente junto a su féretro abierto. A un lado estaba sentada Irina, la hija de Gorbachov, junto con otros familiares.
Flanqueando el féretro se encontraban dos guardias de uniforme, mientras los visitantes ofrendaron flores y señales de respeto.
Durante su permanencia en el poder, de 1985 a 1991, esta figura clave del siglo XX impulsó reformas democráticas y económicas para tratar de salvar a la Unión Soviética, con lo que puso fin a la guerra fría.
Pero el proceso histórico que generó precipitó el desmembramiento del país que durante décadas había disputado la primacía mundial con Estados Unidos. Ese legado contrastado le vale hasta hoy el aprecio de los países occidentales, que lo ven como un hombre de paz. Muchos rusos, en cambio, le atribuyen el repliegue geopolítico de Moscú y el desmoronamiento económico y moral de Rusia en los años posteriores a la desaparición de la Unión Soviética. Confirmando esa desafección, el gobierno ruso no decretó ningún día de duelo oficial.
La solemne ceremonia se desarrolló en ausencia de Putin, lo que el Kremlin atribuyó a problemas de agenda. El mandatario no ignoró totalmente el deceso: el jueves pasado visitó el hospital donde falleció Gorbachov y la televisión lo mostró inclinándose ante el féretro, sobre el cual colocó flores.
Tras asistir a la ceremonia de despida del ex líder soviético, Dimitri Medvediev, vicesecretario del Consejo de Seguridad de Rusia, hizo una publicación en redes sociales refiriéndose al colapso de la Unión Soviética en 1991 en la que acusó a Estados Unidos y a sus aliados de tratar de provocar la ruptura de Rusia.
Según explicó, algunos en Occidente querrían aprovechar el conflicto militar en Ucrania para empujar a nuestro país a un nuevo giro de desintegración, hacer todo lo posible a fin de paralizar las instituciones estatales de Federación Rusa y privar al país de controles eficientes, como ocurrió en 1991.
En plena crisis abierta entre Moscú y Occidente a causa del conflicto en Ucrania, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, cercano al Kremlin, fue el único dirigente extranjero que visitó Moscú, y presentó sus respetos ante los restos de Gorbachov.
En otro tema, el embajador de Rusia ante Naciones Unidas, Vassily Nebenzia, dijo que es alarmante que a menos de tres semanas de la reunión anual de líderes mundiales en la Asamblea General, ninguno de los 56 miembros del equipo de avanzada ni de la delegación encabezada por canciller ruso, Serguei Lavrov, haya recibido una visa para entrar a Estados Unidos.