jueves, 18 de marzo de 2021

México SA

Reforma constitucional vs. actitud de jueces // Proteger interés nacional, no a malandros // Suspensiones provisionales a destajo
Carlos Fernández-Vega
El encontronazo por las recientes modificaciones a la Ley de la Industria Eléctrica –aprobadas por el Congreso– no se da entre los poderes Judicial y Ejecutivo, sino entre éste y la denominada minoría rapaz, es decir, el grupo compacto de empresarios con grandes fortunas amasadas –a costillas de la nación– en los tiempos neoliberales. Y en este capítulo resulta más que obvio que los defensores de esa mafia no son más que fichas pagadas: jilgueros disfrazados de representantes del pueblo y jueces autónomos e imparciales, para quienes la moral es un árbol que da moras o sirve para una chingada (el Alazán tostado dixit).
Como el raudo juez Juan Pablo Gómez Fierro –una de esas fichas– no se daba abasto en eso de conceder suspensiones provisionales a diestra y siniestra para proteger a los consorcios privados de las citadas modificaciones, otro magistrado, Rodrigo de la Peza López, entró al quite para atender, a la velocidad de la luz, las peticiones de la minoría rapaz que se niega a perder los privilegios que generosamente les dieron los gobiernos neoliberales.
Pero en el Ejecutivo conocen la fórmula: para uno que amanece temprano, otro que no duerme, y en este sentido el presidente López Obrador subrayó que si los jueces, magistrados, ministros determinan que es inconstitucional y que no procede (la modificación a la Ley de la Industria Eléctrica), entonces enviaría una iniciativa de reforma a la Constitución, porque no puedo ser cómplice del robo, del atraco, no puedo aceptar que particulares dañen la hacienda pública y afecten la economía popular, sobre todo la de los más pobres. Privatización en México, en el periodo neoliberal, es sinónimo de corrupción.
La polémica, dice el mandatario, surge a raíz de que su gobierno frenó el atraco, corregimos todos estos excesos. Se trata de una banda de cuello blanco; se dedicaron a saquear, a robar, a hacer jugosos negocios al amparo del poder público y en el caso de la industria eléctrica y de la industria petrolera, pues no tengo duda; pero no sólo eso, en los reclusorios, en la construcción de hospitales, en todo; no perdían ni siquiera su respetabilidad y decían que eran negocios, cuando en realidad estaban robando. Muy mal para el país y muy bien para ellos.
López Obrador no descubre el hilo negro, pero siempre es bueno tenerlo presente: “venían empresas extranjeras a hacer su agosto, nos veían como país de conquista y eso ya cambió. Pero como son intereses que tienen que ver con grupos financieros, con grupos empresariales, con los medios de comunicación, con los intelectuales orgánicos, desde luego con jueces, con magistrados, con ministros, con legisladores… Acuérdense, porque se olvida, se padece de amnesia, pero hay una denuncia en la Fiscalía General de la República, porque cuando se aprobó la reforma energética (la de Peña Nieto) se entregaron sobornos a legisladores para votar a favor de ella, que sirvió de paraguas, de marco, para llevar a cabo las privatizaciones en la industria eléctrica y en la industria petrolera. Entonces, ese es el fondo del asunto”.
De cualquier suerte, el mandatario señaló que las suspensiones provisionales otorgadas por el mencionado par de jueces (y las fichas que se agreguen) permiten transparentar todo lo relacionado con la política de privatización en el periodo neoliberal, cuando se le dio prioridad a las empresas particulares, sobre todo extranjeras, para generar energía eléctrica, vender la luz a precios altos y darle preferencia al mismo tiempo a particulares y cobrar más a las familias, a los consumidores domésticos. Querían dejar todo a particulares, nacionales y extranjeros, todo al mercado, y utilizar nada más al Estado para protegerlos, para rescatarlos en caso de que les fuera mal, como sucedió cuando el Fobaproa.
Pero se les apestó, porque todo esto se trata de un asunto de interés nacional, no de la ambición de malandros, fifís.
Las rebanadas del pastel
Bien por la cancillería mexicana que conmina a Luis Almagro, (aún) secretario general de la Organización de Estados Americanos, a dejar su injerencismo en Bolivia, aunque haría mejor si promueve la destitución de ese nefasto personaje, o cuando menos para que comparta celda con Jeanine Áñez… Hoy, 83 aniversario de la expropiación petrolera.
cfvmexico_sa@hotmail.com

Pemex revirtió 16 años de caídas en la producción
Su aportación equivale a 91% del gasto público en inversión
A 83 años de la expropiación, es el mayor contribuyente al fisco
▲ Informes sobre nuevos yacimientos y mejores cifras de producción se anticipan para la celebración del 83 aniversario de la expropiación petrolera. Imagen de archivo.Foto Marco Peláez
Israel Rodríguez
Periódico La Jornada  Jueves 18 de marzo de 2021, p. 18
Por primera vez en 16 años, Petróleos Mexicanos (Pemex) logró detener en 2020 el desplome en la producción, hecho que marca la conmemoración del 83 aniversario de la expropiación petrolera, este jueves, que se realiza en un momento en el que el Ejecutivo adelantó el descubrimiento de un yacimiento en Tabasco.
Durante la actual administración Pemex logró estabilizar y revertir marginalmente las caídas en la extracción, registradas desde mediados del sexenio del ex presidente Vicente Fox (2000-2006).
De 2004 a enero de 2019, cuando se iniciaba la actual administración, la producción de crudo registró una caída acumulada de un millón 800 mil barriles diarios, lo que representa una reducción de 53 por ciento en el periodo, revelan informes oficiales.
De 2004, cuando se alcanzó un récord en la extracción de crudo de 3 millones 400 mil barriles diarios, pasó a un millón 600 mil barriles por día en 2019, primer año del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En 2020, pese a las afectaciones por el confinamiento y la reducción en la producción acordada por la OPEP –vigente de mayo a julio–, mantuvo una producción promedio de un millón 640 mil barriles diarios.
Pemex se mantuvo el año pasado como el mayor contribuyente al fisco, situación que se repetirá en 2021. De acuerdo con cifras oficiales, el año pasado enteró al fisco 598 mil 323 millones de pesos.
En 2019 Pemex entregó a la Federación 875 mil 79 millones de pesos por contribuciones. Así, en los primeros dos años de la actual administración federal, la empresa aportó un billón 473 mil 402 millones de pesos a la hacienda pública.
Este logro se dio en el contexto de la crisis que vivió la empresa el año pasado por los efectos del Covid-19, que provocó la caída de los precios internacionales del crudo y de productos petrolíferos, así como la disminución de las ventas internas de combustibles.
Los recursos que la empresa productiva del Estado aportó al gobierno federal en 2020 equivalen a financiar 91.6 por ciento del gasto total en inversión física del sector público federal o 31.4 por ciento del financiamiento del gasto de operación de todo el sector público federal. Con las contribuciones que realiza Pemex, se financia 10.4 por ciento del total del gasto público de la Federación (incluyendo participaciones a estados y municipios).