La secretaria de Energía, Georgina Kessel, flanqueada por el director de la CFE, Alfredo Elías Ayub, y por el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, en Bucareli.Foto María Luisa Severiano
Electricistas se manifiestan en las cercanías de la dependencia contra la liquidación de Luz y Fuerza del CentroFoto María Luisa Severiano
Patricia Muñoz y Fabiola Martínez
Periódico La Jornada
Lunes 12 de octubre de 2009, p. 5
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) determinó promover una controversia constitucional en contra del decreto presidencial de liquidación de Luz y Fuerza del Centro (LFC). Los abogados de la organización preparan un amparo a nivel general del gremio y la presentación de más de 66 mil recursos individuales. Además de la batalla legal, el sindicato encabezará una movilización social opositora a la estrategia del gobierno federal y llevará su lucha hasta las últimas consecuencias.
Los trabajadores dejaron atrás la disputa electoral horas antes de lo que ya califican de sabadazo. Diez horas después de la toma de las instalaciones de LFC por las fuerzas federales, el SME ya tenía acordado un pronunciamiento conjunto para rechazar la extinción de su empresa, y estaban reunidos en el Monumento a la Revolución, listos para el plan de acción, la mayoría de los 66 mil afiliados a esta organización.
Alrededor de las 3 de la mañana, mediante llamadas telefónicas, vino el rencuentro de quienes la víspera se habían lanzado fuertes acusaciones. Martín Esparza, líder del SME, y Alejandro Muñoz, de la corriente Transparencia Sindical, pactaron una tregua, acordaron rechazar a toda costa la extinción de la empresa y llamaron a los trabajadores a la unidad y a no aceptar de ninguna forma sus liquidaciones.
En la reanudación de la asamblea permanente, en la cual fue insuficiente el auditorio para dar cabida a miles de electricistas, Esparza advirtió a los trabajadores de la gravedad de la situación y les dijo que nadie tiene derecho a cansarse, porque hoy tienen que salir la fuerza y el ingenio del gremio. En respuesta se escuchó un estruendoso ¡Aquí se ve la fuerza del SME!
Nadie durmió. Algunos que llegaron con sus familias se fueron al Monumento a la Revolución para delinear la primera fase de la defensa; desde el inicio marcaron que la vía era la discusión con el gobierno federal, aunque de manera paralela elevarían la denuncia sobre este decreto anticonstitucional a instancias internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Organización Internacional del Trabajo.
Además anunciaron la movilización permanente: este lunes marcharán a la Cámara de Diputados, el próximo jueves realizarán un recorrido del Ángel de la Independencia al Zócalo; también realizarán jornadas de protestas múltiples en diversas dependencias y volanteo masivo –casa por casa– para informar a la opinión pública sobre el acto autoritario del gobierno de Felipe Calderón.
Al mediodía de este domingo, las calles Ignacio Ramírez y Bucareli resultaron insuficientes para dar cabida a las gruesas columnas de trabajadores que debieron avanzar rumbo a la Secretaría de Gobernación; ahora el blanco de su enojo era el nombre de Felipe Calderón, cuya sola mención provocaba rechiflas. No hubo mantas, apenas mensajes escritos en cartulinas con las que mostraban su repudio a la sentencia gubernamental anunciada.
En ese ambiente avanzaron a Gobernación a paso veloz. Los líderes no iban a la vanguardia, la multitud los envolvió y debieron caminar al centro y al paso de los trabajadores. Los rostros, las cartulinas improvisadas y las consignas mostraban indignación, pero sobre todo desolación ante la posibilidad de que a partir de este lunes nadie reciba salario; en cambio, todos están convocados por el gobierno para ir a cobrar su liquidación.
En el recorrido, Martín Esparza mostró la carta que entregaría al responsable de la política interna, con cuatro puntos: derogación del decreto del Ejecutivo, que se publicó este domingo; reinstalación de todos los trabajadores en su empleo, retiro de la fuerza pública e instalación de una mesa de trabajo.
–¿Se puede revertir un decreto presidencial? –se le preguntó.
–Claro que sí, hay controversias constitucionales. Se puede echar para atrás.
Para ello, anunció más tarde, también hoy se inicia un cabildeo con todas las fuerzas políticas para que esta controversia sea promovida desde el Congreso de la Unión. Esparza dice contar con el apoyo de partidos como PRD, PT y Convergencia.
Detrás del dirigente iba su opositor en las pasadas elecciones sindicales, Alejandro Muñoz, quien en los hechos dio a Esparza la representatividad para negociar con el gobierno federal. También asistió a la marcha Rosendo Flores, dirigente del sindicato electricista por tres periodos consecutivos, quien sobre la desaparición de LFC dijo: Es la agresión más fuerte que el sindicato ha recibido en su historia.
Al llegar a un costado del Reloj Chino, ya los esperaban funcionarios de la Unidad de Gobierno, quienes lista en mano gritaban a cada uno por su nombre, ante la custodia de policías federales, algunos con el rostro cubierto. A la salida, sin resultados ni ofertas del gobierno, regresaron al recinto sindical, donde se llevó a cabo la asamblea dentro y fuera del inmueble.
Estaban de vuelta donde empezaron la jornada; muchos no estaban conformes, hubieran querido una protesta más recia: Ahora resulta que nos despiden y nos regresamos tranquilamente a discutir quién sabe qué al sindicato. Los dirigentes buscaron endurecer el tono e incluso se declaró al sindicato en estado de emergencia.
Esparza señaló que ahora el Sindicato Mexicano de Electricistas no sólo va por su lucha, sino también a promover un frente nacional en defensa de los intereses del pueblo y la nación. El gobierno de Felipe Calderón se va a descarrilar, dijo. Agregó que la solidaridad con esta organización puede llevar a una movilización masiva de trabajadores en todo el país y planteó que los trabajadores no se van a rendir, pues según expresó el secretario del interior, Humberto Montes de Oca, están preparados para una lucha prolongada.
Al final de la discusión sindical, el secretario del exterior, Fernando Amezcua, deslindó a los trabajadores de fallas o caídas del servicio, sobre todo en horas pico, y auguró que este problema va a ir escalando.
El gobierno busca entregar a sus amigos la red de fibra óptica, advierte Esparza
Dos ex secretarios foxistas de Energía ya tienen preparado un negocio multimillonario, alerta
Patricia Muñoz y Fabiola Martínez
Periódico La Jornada
Lunes 12 de octubre de 2009, p. 6
En el trasfondo de la liquidación de Luz y Fuerza del Centro (LFC) está la clara intención de abrir las puertas de par en par a negocios millonarios en este sector para los amigos del gobierno, como el que ya tienen preparado dos ex secretarios de Energía del sexenio de Vicente Fox, Frenando Canales Clariond y Ernesto Martens, con la concesión que obtuvieron para explotar la red de fibra óptica de la empresa.
Es clara la intención de privatización de los servicios que presta esta compañía, señaló Martín Esparza, dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME). Explicó que de lo que se trata toda esta embestida contra el gremio es de hacerlo a un lado para facilitar las concesiones del ramo a la iniciativa privada nacional y extranjera.
El dirigente explicó que el sindicato había presentado una solicitud para que la concesión de red de fibra óptica la operara la misma paraestatal; incluso había dado a conocer los estudios técnicos, de mercado y de operación que demostraban que la empresa podía dar el servicio. Sin embargo, a esta solicitud ni siquiera se le dio respuesta, porque ya tenían el negocio armado con políticos y empresarios afines al panismo.
Martens y Canales Clariond tienen armada una empresa con capital español para explotar el negocio de las telecomunicaciones por medio de la venta de servicio de voz, datos e Internet a través de la estructura de Luz y Fuerza del Centro. Es un hecho consumado, puesto que la concesión ya la obtuvieron, dijo.
La empresa WL Comunicaciones no sólo tiene la autorización para operar, sino que aún no ha empezado a hacerlo y ya obtuvo descuentos anticipados de las tarifas de uso de la red, indicó Esparza.
Marcha de trabajadores electricistas a la Secretaría de Gobernación, en apoyo a las pláticas que ahí sostuvieron sus dirigentesFoto María Luisa Severiano
El dirigente hizo ver que inicialmente la empresa –representada por el despacho de Diego Fernández de Cevallos– iba a pagar un promedio de 170 pesos por poste de conexión; sin embargo, sorpresivamente logró un convenio adicional para obtener un descuento y modificar esta tarifa, por lo que ahora sólo le costará 50 pesos este servicio.
No solamente se trata de la explotación de la fibra óptica, cuya red de más de mil kilómetros se pagó con recursos del pueblo y ahora la van a comercializar empresas panistas, sino que el negocio privado de Luz y Fuerza del Centro se va a expandir, añadió.
Según Martín Esparza, están en camino múltiples autorizaciones de generación de electricidad para empresas privadas, muchas de ellas trasnacionales, que ya no tendrán la denuncia del SME.
La generación de energía eléctrica por empresarios privados no sólo ha mostrado un crecimiento exponencial en los últimos años, sino incluso ha significado en algunos estados, sobre todo del norte, un negocio millonario para quienes encabezan esas compañías, pues acaparan la venta de luz de las grandes industrias de esta región, mientras a la paraestatal le dejaban el servicio de los consumidores domésticos de baja rentabilidad, indicó Esparza Flores.
De entrada, en la toma de las instalaciones de Luz y Fuerza ya participaron no sólo técnicos de la Comisión Federal de Electricidad, sino también contratistas que querrán su tajada en negocios del sector en pago al apoyo que dieron a esta acción gubernamental, concluyó.