lunes, 11 de abril de 2016

Elecciones 2016 y recortes 2017.

Por Martín Esparza Flores /
09 Abr 2016
Martín Esparza Flores
Incierto panorama económico
La retórica que estará presente en las campañas de los partidos políticos a competir en la renovación de doce gobiernos estatales en junio próximo ocultará hasta debajo de las piedras el informe entregado a la Cámara de Diputados por las autoridades hacendarias, donde se expone el incierto panorama económico que México enfrentará en 2017 y que prevé más recortes al presupuesto por 175 mil millones de pesos.
Sin importarle haber alentado reformas estructurales que no terminan de cuajar, la clase política irá una vez más en busca del voto de los mexicanos, reciclando en manifiesto desparpajo las promesas siempre incumplidas como la creación de empleos estables, más seguridad y un mejor nivel de vida al que millones de personas ven cada vez más lejano.
¿Qué excusas inventarán esta vez sus candidatos, si los votantes les piden respuestas sobre la quiebra del país?
El terreno de crisis nacional no es propicio para sembrar las acostumbradas demagogias del pasado, sobre todo ahora que el moderado optimismo oficial tiene en los pronósticos y evaluaciones de calificadoras internacionales como Moddy´s Investors Service —una de las tres más influyentes en el mundo—, a su punto de referencia para poner los pies en la tierra y evaluar las limitadas expectativas de crecimiento económico en los dos años que le restan al sexenio.
Moddy´s cambió sus proyecciones de calificación a México de “estable a negativa”, sobre todo por factores como la urgente inyección de liquidez que el gobierno debe hacer a Pemex para afrontar sus pasivos, al igual que el débil desempeño de la economía nacional y las crecientes dificultades externas como la baja en los precios internacionales del petróleo. De las estimaciones de la calificadora dependen en gran parte las decisiones que tomen los inversionistas para llevar sus capitales a determinados países. Y el nuestro carece de buenas cartas de recomendación.
La información entregada por Hacienda a los diputados federales en sus precriterios de política económica 2017 anuncia el oscuro panorama que espera a los mexicanos el año entrante y donde no se vislumbran mejoras a la depreciación del peso frente al dólar ni un significativo repunte a los precios internacionales del petróleo, señalando, incluso, una reducción en la plataforma de extracción del crudo.
En sus precriterios, Hacienda modificó algunas de sus perspectivas establecidas para este año en que, por ejemplo, había fijado una cotización de 15.9 pesos por dólar, para 2017 pronostica una cotización de 18 pesos por dólar; igualmente, mientras en septiembre pasado señaló que la mezcla del crudo mexicano alcanzaría un precio de 50 dólares por barril, ahora lo promedia en 25 dólares y lo vaticina en 35 dólares para 2017. No más.
En sus estimaciones para este año, las autoridades hacendarias señalaron una producción de crudo de 2 millones 247 mil barriles, pero ahora dicen a los diputados que ésta sólo alcanzará los 2 millones 123 mil barriles y para 2017 bajará a