No considero que en la isla haya una dictadura, declara el diplomático Alberto Navarro en La Habana
Afp y Europa Press Periódico La Jornada
Domingo 28 de febrero de 2021, p. 18
Bruselas. La Unión Europea (UE) convocó a su embajador en Cuba, el español Alberto Navarro, por firmar una carta abierta al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidiéndole levantar el bloqueo impuesto a la isla, indicó ayer un portavoz de la diplomacia europea.
Hemos pedido al embajador que venga a Bruselas para dar explicaciones al Alto Representante, Josep Borrell, indicó a la agencia de noticias internacionales Afp un vocero de la diplomacia europea.
El representante de la UE en la isla debe explicar por qué tomó la iniciativa de firmar dicha carta y cuáles fueron sus motivos, explicó.
La decisión de Borrell viene después de que un grupo de 16 eurodiputados de centro y de derecha, en su mayoría españoles, le solicitaron la destitución del jefe de la delegación europea en Cuba desde 2017 por un “acto grave.
Consideramos que el embajador es indigno del cargo que ocupa (...) y le pedimos que lo sustituya inmediatamente, le requirieron el 24 de febrero en una carta publicada por el portal web Político.
Para los parlamentarios, entre ellos Leopoldo López –padre del opositor venezolano homónimo–, Navarro adopta posiciones políticas acordes con un régimen que no respeta ni defiende los derechos humanos ni la pluralidad democrática.
Igualmente, acusaron a Navarro de intentar que su disparatada iniciativa fuera respaldada por representantes diplomáticos de otros países miembros del bloque, que declinaron firmar la carta propuesta por el embajador, indicó el conservador Partido Popular en un comunicado.
El diplomático negó esta semana al portal español ABC que haya firmado ninguna carta de forma individual dirigida a Biden, pero sí reconoció que se sumó a la iniciativa de cientos de artistas e intelectuales que reclaman el levantamiento de sanciones, a lo que añadió que contó con todo el apoyo del Alto Representante y de su equipo.
La llamada de Bruselas se produce horas después de que el medio independiente cubano CubaNet publicó una entrevista con Navarro. No, yo no considero que Cuba sea una dictadura. Claro que no, señaló, aunque se negó a precisar mayores detalles.
Como embajador yo no puedo andar dando calificativos y menos del gobierno en el que estoy acreditado. Yo lo que voy constatando son los pasos que se dan, la Constitución que se aprueba, las medidas para el trabajo por cuenta propia que se aprueban; espero que ahora se impulse también a la pequeña y mediana empresa, apuntó.
Tras dos décadas de la llamada Posición Común, más estricta en materia de derechos humanos, la UE confirmó su cambio de política hacia la isla con la firma, en 2016, de un acuerdo con Cuba, en pleno acercamiento de La Habana y la administración de Barack Obama.
Cuba, que está bajo bloqueo estadunidense desde 1962, sufrió no obstante durante el gobierno de su sucesor, Donald Trump, una cascada de sanciones orientadas a perjudicar la economía de la isla.
El actual gobierno del demócrata Biden aseguró poco después de tomar el poder que revisará las políticas impuestas por Trump con relación a la isla, aunque por el momento no ha tomado ninguna decisión.
En Bruselas, la Eurocámara, que ha concedido hasta en tres ocasiones el premio Sájarov de derechos humanos a disidentes cubanos, suele adoptar una posición más ofensiva contra el gobierno cubano.
Pero la diplomacia europea, que con Borrell al frente elevó el tono sobre derechos humanos, sigue un enfoque más pragmático para lograr cambios, basado en el diálogo y en facilitar las inversiones de empresas del bloque en la isla.
La UE y Cuba celebraron el viernes una tercera ronda de diálogo sobre derechos humanos en el contexto del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación aplicado provisionalmente desde 2017.
A mediados de enero, Borrell y el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, mantuvieron una reunión telemática en la que discutieron sobre la futura cooperación y el impacto de las sanciones económicas estadunidenses.
Por otra parte, emigrados cubanos residentes en Estados Unidos y Canadá realizarán hoy domingo la octava edición de las caravanas Puentes de Amor, para exigir a la Casa Blanca el levantamiento del bloqueo impuesto por Washington a La Habana.
Sahara Occidental: 45 años de lucha
▲ Independentistas del Frente Polisario, quienes retomaron las armas en noviembre pasado, desfilaron con motivo del 45 aniversario de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática. El responsable del organismo, Khatri Addouh, responsabilizó a la ONU del bloqueo político y de apoyar a Marruecos en el Sahara Occidental, territorio disputado desde hace tres décadas tras la retirada de España. La imagen, en un campo de refugiados cerca de Tinduf, al sur de Argelia. Foto Ap / Afp
El Frente Polisario denunció ayer que la complicidad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) ha facilitado a Marruecos escalar sus agresiones contra la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), que ayer conmemoró el 45 aniversario de su proclamación.
De acuerdo con el Polisario, que lucha por la independencia del Sahara Occidental y el fin de la ocupación colonial marroquí, el organismo multilateral debe persuadir a Rabat de cesar su anexión ilegal de dos terceras partes del Sahara Occidental y celebrar el referéndum establecido en 1991 por la Misión de Naciones Unidas para el Sahara Occidental (Minurso).
El actual recrudecimiento del conflicto entre Rabat y el pueblo saharaui se inició en noviembre pasado, cuando el ejército marroquí se desplegó en Guerguerat, localidad usada como paso fronterizo entre Marruecos y Mauritania, pese a que se trata de una zona desmilitarizada bajo control de la fuerza de interposición de la ONU. La posición beligerante de Rabat se vio impulsada al mes siguiente debido a un acto de provocación perpetrado por Donald Trump: como un último gesto hacia Israel cuando ya sabía que en enero tendría que abandonar la Casa Blanca, el magnate reconoció la soberanía marroquí sobre el Sahara Occidental, a cambio de que el régimen de Mohammed VI entablara relaciones diplomáticas con Tel Aviv.
La maniobra de Trump fue tan execrable y contraria a la legalidad internacional como los actos del franquismo que dieron origen a un conflicto que ya se prolongó por casi medio siglo y causó un sufrimiento incuantificable al pueblo saharaui. Desde que logró su independencia de España y Francia en 1956, Marruecos presionó a la primera para que le entregara los territorios del Sahara Occidental, que continuaron bajo control de la metrópoli europea hasta 1975.
Ese año, preocupados por el complejo escenario interno que vaticinaba la agonía del dictador Francisco Franco, los ministros del tirano determinaron ceder ante el empuje marroquí (respaldado desde entonces por Washington), y abandonar apresuradamente su colonia norafricana. Esta cesión de territorios traicionó los compromisos adquiridos con los habitantes de lo que entonces se llamaba Sahara Español, y violentó los mandatos de la ONU.
Cabe esperar que los anhelos de libertad del pueblo saharaui prevalezcan sobre la ocupación colonial de Marruecos, y la casi total indiferencia de la comunidad internacional.