Domingo 6 de abril de 2025, p. 18
San Salvador., China rechazó ayer en Panamá las presiones de Estados Unidos para afectar las relaciones con ese país latinoamericano, las cuales, subrayó, siempre se han basado en respeto mutuo y beneficio recíproco.
Nuestra nación siempre ha mantenido los principios de respeto mutuo, igualdad y beneficio recíproco en el desarrollo de las relaciones con Panamá, subrayó la embajada del gigante asiático en una declaración en sus redes sociales.
En el comunicado, Pekín respondió a declaraciones del subsecretario de Estado estadunidense, Christopher Landau, en las cuales ha vuelto a pronunciar palabras irresponsables y nada fundamentadas contra la parte china, aunque reconoció las acciones de Panamá para contrarrestar la influencia maligna del Partido Comunista de China.
Precisó que Washington actúa con prepotencia contra el resto del mundo para hacer despojos sistemáticos, y ejerce influencia maligna, algo que todos ven con total claridad.
Panamá, añadió, no es el patio trasero de ninguna gran potencia, y aseguró que sembrar discordia en nuestras relaciones no tiene ni tendrá apoyo alguno, y está condenado al fracaso.
La embajada de Estados Unidos en Panamá divulgó también los temas que trataron en una conversación telefónica el subsecretario Landau y el ministro de Relaciones Exteriores panameño, Javier Martínez-Acha, quien calificó las conversaciones de intercambio cordial y constructivo, durante el cual abordaron migración irregular, crimen organizado, tráfico de drogas y amenazas asimétricas que afectan a la región.
Martínez-Acha aseveró que toda cooperación de Panamá se dará en el marco de nuestra Constitución, nuestras leyes y el Tratado de Neutralidad del Canal, con transparencia, respeto y beneficio mutuo.
Desde que tomó posesión, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump ha insistido en su decisión de apoderarse nuevamente del canal de Panamá, aduciendo, entre otros motivos, que China controla la estratégica vía acuática que une los océanos Atlántico y Pacífico, pese a que esas versiones han sido rechazadas por las autoridades panameñas.
Soberanía alimentaria, “la mejor defensa ante cualquier arancel”: Sheinbaum
“Que en México se produzca lo que consumimos los mexicanos, que es la mejor defensa frente a cualquier arancel, frente a cualquier cosa”, recalcó la mandataria durante el evento en Zinapécuaro, Michoacán. Foto Presidencia Foto autor
Néstor Jiménez, enviado
05 de abril de 2025 20:31
Zinapécuaro, Mich. En el banderazo de salida del programa Cosechando Soberanía, que arrancó este sábado desde esta demarcación michoacana, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo subrayó que producir lo que se consume en el país “es la mejor defensa frente a cualquier arancel”.
Dicho programa consiste en créditos con acompañamiento técnico y una serie de garantías para pequeños y medianos productores del campo. Es el primero de los 18 puntos anunciados por la mandataria esta semana, para impulsar el Plan México, y los cuales presentó luego de las medidas arancelarias que aplicó el gobierno de Estados Unidos a las importaciones a ese país desde casi todas las naciones.
Con el nuevo programa se busca que los pequeños y medianos productores “puedan aumentar, lo que queremos al final para todo el país, que es la producción, mejorar la producción y que haya más maíz, que haya más frijol, y que en México se produzca lo que consumimos los mexicanos, que es la mejor defensa frente a cualquier arancel, frente a cualquier cosa”, recalcó la jefa del Ejecutivo federal en un acto frente a cientos de michoacanos, muchos de ellos productores de la región.
Al insistir que una de las metas es incrementar la producción de alimento como el maíz blanco o el frijol, lamentó que de éste último, se importan cerca de 300 mil toneladas.
Para ello, subrayó, “ahora llega este nuevo programa con créditos más baratos que cualquier otro que está en el mercado”, con el que, además, los beneficiarios tendrán garantizado la compra de su productos, así como garantías de precio hasta cierto nivel, aplicable en casos de sequías, heladas o lluvias fuertes. De igual forma, tendrá garantizado la compra de su producto a “un precio justo”.
Momentos antes, el secretario de Agricultura, Julio Berdegué Sacristán, explicó que una de las metas es que los productores puedan producir más alimentos enfocados al abasto nacional, ya que “los gobiernos liberales” priorizaban sólo la agricultura de exportación y grandes productores, en cambio, ahora se prioriza el mercado interno.
Pregunta por la elección judicial
Durante el acto, la presidenta Claudia Sheinbaum preguntó a los asistentes sobre los comicios del próximo 1 de junio, en los que, además de la elección local en Durango y Veracruz, se elegirán a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, magistrados y jueces.
“Me van a regañar si lo digo, pero lo voy a decir. ¿Qué va a haber el 1 de junio?, ¿Qué va pasar ese día? No lo digo yo, lo dicen ustedes?, ¿Qué debo pasar ese día?”, señaló la mandataria.
Y ante los gritos entre los que algunos indicaron que se realizara la elección de integrantes del Poder Judicial, Sheinbaum Pardo agregó: Exactamente… ¿Quién puede sanear el poder judicial?, el pueblo, eso quiere decir con el pueblo, todo; y sin el pueblo, nada”.
Avanza el refuerzo de la soberanía nacional
Antonio Gershenson
Tarde o temprano, el pueblo mexicano vivirá más de cerca un rescate firme de nuestra autodeterminación. Para lograrlo, todos los aspectos deben ser considerados. Que ningún rubro quede fuera para que hablemos de una soberanía completa de fondo y no sólo de forma. Para ello es imprescindible empezar a tomar distancia de nuestros vecinos del norte, Estados Unidos y Canadá, sin romper relaciones, por supuesto.
En estos primeros meses del segundo periodo del gobierno del republicano Donald Trump, hemos visto lo vulnerable que puede ser una economía tan aparentemente sólida como la de Estados Unidos. En la mente de los millonarios estadunidenses y extranjeros del gabinete que promueven y alientan las controvertidas decisiones económicas de Trump, brillan por su ausencia el desarrollo y bienestar de la sociedad de ese país.
Nunca lo fueron. Ni promotores de la democracia ni defensores de la libertad y, mucho menos, garantes de la paz mundial. Desde la invasión inglesa al continente americano y, específicamente a lo que hoy conocemos como Estados Unidos, las multitudes de inmigrantes que fueron formando un país, mas no una nación, inventaron un sueño americano que, aceptemos o no, les proporcionó cierta identidad propia.
Actualmente, la ciudadanía en general vive otra realidad. Estados Unidos ya no es la tierra que promete grandes oportunidades para el desarrollo económico individual. El pueblo de la segunda década del siglo XXI está despertando de un sueño americano viejo y desgastado. Los millonarios más millonarios han tomado el poder, directamente y sin obstáculos. Quienes votaron por el regreso del gobierno republicano esperaron cuatro años a Trump, su líder; sin embargo, lo que miles de personas están viviendo es un sorprendente desengaño. Esperaban renovar el sueño de grandeza, pero con el desastre económico en puerta infringido con intención de romper el equilibrio del mercado libre para constatar su dominio sobre el mundo, no se ve por dónde lograrán ese deseo. Más bien, están comprobando que los próximos cuatro años serán una pesadilla nacional.
En el caso de México, a partir del 1º de diciembre de 2018 empezamos a salir de otra pesadilla, la neoliberal. Otro futuro estamos esperando, porque ya lo hemos venido preparando, porque ya mucha gente ha dado su vida trabajando por echar abajo ese criminal sistema económico y político. Para eso han servido años de movilizaciones, de movimientos sociales, huelgas, guerrillas, creación de partidos de izquierda reprimidos, unificaciones políticas; en fin, un sinnúmero de acciones que, aunque no lo reconozca la derecha recalcitrante del país, están dando frutos.
En 2018 tuvimos el primer presidente progresista con un proyecto de nación que incluyó a toda la población, a los 32 estados y a los 2 mil 478 municipios, sin importar qué partido político los gobernara.
Es interesante dimensionar las posibilidades de desarrollo industrial del país teniendo como base el Plan México (Plan MX) que ha sugerido el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Dicho plan nos proporcionará mayor certeza de que, en relativamente corto tiempo, contaremos con mejores oportunidades para la actual y las nuevas generaciones.
No existe beneficio alguno para una sociedad si no cuenta con mayor acceso a la salud universal, a una educación de calidad con oportunidades para la capacitación, si los programas gubernamentales no le garantizan la estabilidad económica y emocional que se necesitan para restablecer el tejido social y, especialmente, si no mejoran la calidad ambiental y la seguridad de la conservación del patrimonio nacional, como ahora lo garantiza el Plan MX. Lo anterior implica que el desarrollo de la ciencia y la tecnología en nuestro país tendrán amplio apoyo federal para continuar y abarcar, cada vez más, aquellos aspectos que, por lo general, han acaparado la iniciativa privada, tanto extranjera como nacional.
Subrayamos que la soberanía energética está en el centro de este Plan MX, pues es la base del proyecto mismo. De nuevo hacemos hincapié en que la energía que nos mueve tendrá que ser cada vez más nacional. De esta forma aseguramos el avance de la ciencia y tecnología de la nación. Vivimos en una globalización que nos obliga a adaptarnos a la metodología de otros países, pero debemos incrementar la nuestra para que en un futuro a mediano y largo plazos no exista duda de que en México se genera conocimiento, el cual puede ser motivo pacífico de intercambio con otros países de cualquier continente, sin amenazas arancelarias o cualquier tipo de arremetidas, más de tipo político que económico.
En cuanto a la energía nuclear, cuyo beneficio económico y menor contaminación ambiental han sido comprobados en otros países y, aquí mismo, es un ejemplo de que contamos con el conocimiento y la tecnología suficientes para continuar creciendo con el apoyo federal. No tenemos la seguridad de que esta industria, en manos de la iniciativa privada, pueda proporcionar el soporte suficiente para su desarrollo acorde a nuestras necesidades. Tal vez la construcción de cuatro plantas nucleares nuevas que sugiere el director de la empresa Dragons Veracruz –que, por cierto, ya no forman parte de la central nuclear de Laguna Verde– sea una alternativa.
Tenemos claro que el plan de la defensa y recuperación total de nuestra soberanía, en todos los planos, es una identidad del gobierno del segundo piso de la Cuarta Transformación y a ello nos avocamos.
(Colaboró Ruxi Mendieta) antonio.gershenson@gmail.com