martes, 30 de abril de 2024

El declive.

José Blanco
La Oficina de Evaluación Neta del Pentágono encargó a la Rand Corporation un estudio referido al declive relativo de la posición de Estados Unidos. El primer capítulo explica con crudeza el problema: Su posición competitiva se ve amenazada tanto desde dentro (por la ralentización del crecimiento de la productividad, el envejecimiento de la población, un sistema político polarizado y un entorno informativo cada vez más corrupto) como desde fuera (por el creciente desafío directo de China y la menor deferencia hacia el poder de Estados Unidos por parte de docenas de países en desarrollo). Mis citas están tomadas del artículo ¿Se está poniendo lentamente el sol en el poder de Estados Unidos?, de David Ignatius, de The Washington Post. El estudio de Rand sería publicado hoy.
Según esa investigación, el declive se está acelerando y, dice Ignatius, hay una narrativa de derechas del declive y otra de izquierdas. Aunque coinciden en que algo falla en Estados Unidos, ambos bandos discrepan, a menudo en extremo, sobre qué hacer al respecto. Con una perspectiva de largo plazo histórico, el estudio afirma: Cuando las grandes potencias han perdido una posición de preeminencia o liderazgo debido a factores internos, rara vez han invertido esta tendencia. Son referidos Roma, la España de los Habsburgo, los imperios otomano y austrohúngaro. Es preciso agregar a Inglaterra. Sobre las causas inmediatas: adicción al lujo y la decadencia, incapacidad para seguir el ritmo de... las demandas tecnológicas, burocracia osificada, pérdida de virtudes cívicas, sobrecarga militar, élites interesadas y beligerantes, prácticas medioambientales insostenibles: el Estados Unidos actual. El estudio, as usual, señala que las élites deberán arreglar el mundo.
Tales tendencias ocurren cuando en toda la geografía dominada por el imperialismo estalla una ola de indignación con olor a conflagración, con largas historias de gestación. En Estados Unidos domina la escena, por hoy, el tsunami estudiantil, que ya se extiende por Francia, Alemania, Italia: la última manifestación en Milán con 500/600 mil manifestantes y más de seis horas de duración fue épica, debido a que iba mezclada con mil protestas frente al gobierno de Meloni.
China extiende la mano a Estados Unidos tratando de sosegar al monstruo herido, pero Blinken dice que hay pruebas de la interferencia de China en la elección de Estados Unidos, sin mostrar ninguna. En tanto, la ola estudiantil amenaza a Biden, que continúa por detrás de Trump en las encuestas. Peor aún: Biden se enfrenta a la posibilidad de que Robert F. Kennedy hijo (RFK) le birle votos demócratas. RFK busca competir con un nuevo partido llamado We The People; lleva como compañera de fórmula a Nicole Shanan, abogada y antigua partidaria de causas demócratas. Shanan se define como demócrata desencantada y cuenta con mil millones de dólares que recibió de su acuerdo de divorcio con Serguéi Brin, cofundador de Google. Dinero de sobra para su campaña.
RFK es un terraplanista que asegura que las vacunas contra el covid-19 demostraron tener una eficacia negativa, pues su aplicación hacía que la gente fuera más propensa a la infección, que no haciendo nada en absoluto. Algunas crónicas sostienen que afirmó que el covid-19 estaba étnicamente dirigido para evitar a los judíos asquenazis y a los chinos. Y Shanan, por su parte, cree que vacunar a los niños ha provocado un fuerte aumento de los casos de autismo. No parece haber nadie que asegure que RFK puede ganar, pero sí que puede inclinar la balanza a favor de Trump. Parte de lo que hoy es Estados Unidos.
Los presidentes, en su segundo mandato, se sabe, pueden ser temerarios y tomar riesgos a los que no se aventuraron durante el primero. Desde esta perspectiva, un nuevo triunfo de Trump es visto como un peligro relacionado con el alto nivel de la deuda pública. Sea Biden o Trump, se enfrentará a la creciente carga de la deuda en el presupuesto del gobierno. Trump sabe algunas cosas sobre el impago de deudas porque sus empresas se han acogido al capítulo 11 del Código de Quiebras al menos cuatro veces, como una vía para eludir sus obligaciones fiscales. Frente a una suspensión del servicio de la deuda por Trump, los tenedores de bonos de esa deuda podrían demandar al Tesoro. No podrían hacer mucho más, pero ello daría al traste con la imagen de la deuda gringa como la inversión más segura disponible en el mundo (los bonos del Tesoro). Para los inversionistas es la piedra angular del sistema financiero internacional. Trump podría culpar a los demócratas por su gasto excesivo. Si el susodicho libra a la justicia, el desmadre trumpiano será de pronóstico reservado. El de Biden sería de otro tipo.
La elección en Estados Unidos se vuelve una bomba de tiempo, Netanyahu prosigue con su brutal limpieza étnica, la guerra amenaza con crecer en el Oriente Medio, la guerra en Ucrania no tiene fin, las tensiones aumentan en Occidente con las olas estudiantiles y de otras clases. La lucha de masas está al alza: signos de nuestro tiempo.

España: alivio temporal
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, informó ayer a la ciudadanía que decidió continuar en su cargo y hacer frente a la más reciente andanada de calumnias con que partidos, organizaciones y medios de derecha y ultraderecha buscan defenestrarlo. La semana pasada, después de que un juez admitiera a trámite una denuncia contra la esposa del mandatario, Begoña Gómez, por presunto tráfico de influencias, Sánchez sorprendió tanto a simpatizantes como a detractores al anunciar que analizaría si vale la pena que sus seres queridos padezcan continuos ataques para que él prosiga con su carrera política.
La respuesta que se dio a sí mismo y a sus conciudadanos es un ejemplo de altura de miras, a la vez que un compendio indispensable de los desafíos contemporáneos de su país y de gran parte del planeta. Vale la pena retomar un pasaje de su discurso: Si consentimos que los bulos deliberados dirigen o dirijan el debate político; si obligamos a las víctimas de esas mentiras a tener que demostrar su inocencia en contra de la regla más elemental de nuestro estado de derecho; si permitimos que se vuelva a relegar el papel de la mujer al ámbito doméstico, teniendo que sacrificar su carrera profesional en beneficio de la de su marido; si, en definitiva, permitimos que la sinrazón se convierta en rutina, la consecuencia será que habremos hecho un daño irreparable a nuestra democracia. En una frase que resuena a ambos lados del Atlántico, el dirigente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) sentenció: O decimos basta, o esta degradación de la vida pública determinará nuestro futuro condenándonos como país.
Con este desenlace, se evita en lo inmediato que la conjura de los conservadores que no se han deshecho de sus reflejos franquistas consume un golpe irreparable a la democracia. Sin embargo, es improbable que las derechas que desde 2014 han conspirado para aniquilar políticamente a Sánchez se rindan ante esta muestra de entereza. Por el contrario, cabe esperar que la embestida arrecie con nuevas calumnias y con una repetición incesante de las falacias que, lamentablemente, han sido validadas por buena parte de la sociedad, intoxicada por medios y opinadores con gran ascendente y nula ética.
Resulta inevitable trazar un paralelismo entre la guerra sucia contra el residente de La Moncloa y la que tiene lugar en México desde hace más de dos décadas contra el presidente Andrés Manuel López Obrador. Aquí como allá se asiste a una perversa conjunción de medios de comunicación e integrantes corruptos del Poder Judicial, en la que los primeros generan un clima de crispación e incertidumbre y buscan desprestigiar a los políticos que les desagradan a fin de legitimar la acción de los segundos, quienes abusan de sus atribuciones, invaden facultades del Legislativo y del Ejecutivo, y coquetean con el golpismo blando; es decir, el que se realiza no mediante tanques y bayonetas, sino usando las instituciones republicanas como armas políticas. En este sentido, no puede olvidarse que apenas en agosto pasado el ministro de la Suprema Corte Luis María Aguilar Morales encabezó un lance fallido para destituir al presidente López Obrador.
Cabe congratularse por la decisión del dirigente socialista, pues, más allá de la persona, su permanencia es una salvaguarda del núcleo de la vida democrática: la prevalencia de la voluntad popular. Es deseable que el terremoto político vivido en España fortalezca y cohesione a los sectores progresistas, democráticos e institucionales, así como que abra los ojos de la ciudadanía a la urgencia de levantar diques ante la usurpación ilegítima que se urde desde los poderes mediático y judicial.

Sánchez llama a una limpieza en el Poder Judicial y los medios
Tras 5 días de reflexión, decide quedarse en el cargo
Analiza el presidente español medidas regulatorias ante el desafío del uso espurio de las redes sociales financiadas por gobiernos de derecha
▲ Madrileños escuchan el mensaje del socialista Pedro Sánchez, quien decidió mantenerse en el cargo.Foto Ap
Armando G. Tejeda  Corresponsal
Periódico La Jornada  Martes 30 de abril de 2024, p. 24
Madrid. El socialista Pedro Sánchez seguirá al frente del gobierno español y por tanto aspira a agotar la legislatura y presidir el Ejecutivo hasta 2027. Lo decidió tras cinco días de reflexión y silencio ante la guerra sucia y acoso lanzados desde hace 10 años por la derecha y ultraderecha contra él y su familia.
Sus socios de coalición, Sumar, y otros partidos periféricos de la izquierda lo instaron a que a partir de este punto y aparte impulse reformas para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sin contar con el Partido Popular (PP) y aprobar una nueva ley para regular a los medios de comunicación, las noticias falsas y la guerra sucia en las redes sociales.
Sánchez empezó el día dirigiéndose al Palacio de la Zarzuela, donde comunicó al rey Felipe VI, en su calidad de jefe de Estado, su decisión. Después regresó a su residencia oficial, el Palacio de La Moncloa, para hacer una declaración institucional en las puertas del recinto y al aire libre, sin aceptar preguntas de los periodistas, que tuvieron que seguir su comparecencia desde un circuito cerrado de televisión.
El líder socialista informó que luego de reflexionar y recibir apoyo y solidaridad tanto de dirigentes políticos como de la militancia de su partido, decidió seguir al frente de la presidencia del gobierno.
Explicó que ha reconocido antes quienes buscan quebrarme, que duele vivir estas situaciones. A veces, la única forma de avanzar es detenerse. He actuado desde una convicción clara. O decimos basta o esta degradación de la vida pública determinará nuestro futuro, condenándonos como país. He dado este paso por motivos personales, pero son motivos que todos pueden entender. Esto no es una cuestión ideológica. Estamos hablando de respeto, de dignidad.
El fango en la vida pública
Adrvirtió que por muy dura que sea la campaña de guerra sucia adoptó la decisión de continuar con más fuerza, si cabe. Esto no va del destino de un dirigente particular. Se trata de decidir qué tipo de sociedad queremos ser. Nuestro país necesita esta reflexión. Llevamos mucho tiempo dejando que el fango contamine nuestra vida pública. Exigir resistencia incondicional es poner el foco en las víctimas y no en los agresores. Esta campaña de descrédito no parará. Podemos con ella.
Aseveró que si continúa esta deriva se cedería ante la derecha que pretende relegar el papel de la mujer al ámbito doméstico, teniendo que sacrificar su carrera profesional en beneficio de la de su marido. Si, en definitiva, permitimos que la sinrazón se convierta en rutina, la consecuencia será que habremos hecho un daño irreparable a nuestra democracia.
Instó al Partido Socialsita Obrero Español y a sus socios en el gobierno a emprender una limpieza en el Poder Judicial y en los medios de comunicación: creo que nuestro país necesita hacer una reflexión colectiva que abra paso a la regeneración, al juego limpio.
En la primera entrevista después de anuncio, en la cadena pública TVE, Sánchez aseveró que estudia medidas para regular a los medios de comunicación: tenemos que ser conscientes del desafío que implica el uso espurio de las redes sociales, también de estas páginas de Internet que están financiadas con distinto dinero, tanto de gobiernos autonómicos como de gobiernos municipales del PP con la ultraderecha, por determinadas empresas, y ser conscientes del desafío que tenemos de profundización de la democracia.
Anunció una respuesta para reformar el Poder Judicial, al afirmar: creo en la separación de poderes y la justicia y creo que es el momento de fortalecerla. Tenemos que dar una respuesta. Me gustaría hacerlo de la mano del PP.
Malestar de catalanes
Sin embargo, el mensaje de Sánchez generó malestar en el separatismo catalán, que lo tildó de electorero y oportunista, por lo que incluso reclamó a la Junta Electoral Central que anulara una entrevista que tenía prevista con TVE, al considerar que pretende influir en las elecciones autonómicas del día 12.
Desde la ultraderecha y derecha el mensaje de Sánhez fue calificado de manipulador. El líder del PP aseguró que el discurso del mandatario es el más peligroso de todos los que ha pronunciado: no acepta la discrepancia, quiere un país a su medida y a su servicio. Quiere ser más presidente a costa de menos democracia. No quiere oposición, no quiere justicia, no quiere medios de comunicación. Sólo se quiere a sí mismo.
Recriminó haber utilizado al rey de actor secundario de su puesta en escena.
El líder de extrema derecha, Santiago Abascal, añadió que el mensaje de Sánchez supone una reafirmación de su golpe contra la unidad de España, la convivencia, el estado de derecho, la separación de poderes y la libertad de prensa, con lo que busca la persecución contra jueces independientes, medios libres y oposición, además de sepultar la crítica y garantizar la impunidad para sus crímenes, mentiras y corrupción.
Pura comedia: Aznar
El ex presidente del gobierno, el derechista José María Aznar, tildó el mensaje de Sánchez de comedia lacrimógena de caudillismo, al más puro estilo del populismo peronista.
La Federación de Asociaciones de Periodistas de España y la Asociación de la Prensa de Madrid expresaron su preocupación ante el mensaje de Sánchez, en el que además de no permitir preguntas, anunció medidas de limpieza.